viernes, diciembre 16, 2016

Brisa interior

Voy caminando sin refugio,
naufragando sobre las viñetas que mis ojos reflejan,
sintiendo e interpretando las historias que me encuentro,
las que me sacuden por fuera se me caen,
las que me remueven por dentro me rasgan.

Cuando ves el pasado de frente,
cuando intentas sentir tu presente,
cuando el futuro se nubla sin horizonte.

Voy nadando, aleteando sobre mis sentimientos,
sobre lo que me atrae un sentimiento,
sobre lo injusto que veo en la pobreza del silencio,
a veces más rica que el ruido absurdo.

Voy donde nadie quiere ir,
donde las mareas sin explicación no piensan,
donde la conciencia no se enrabia con tu vida,
voy flotando en mi mundo íntimo,
donde dar la mano no significa una propaganda de algo a cambio,
donde mi voluntad se abraza de lo generoso,
donde no hay niveles que te secuestren.

Cuando el pasado es naturaleza,
cuando el presente si te equivocas puedes aprender,
cuando el futuro no es sólo esperanza,
el tiempo corre,
los cuadros se pintan sin darte cuenta,
y aunque quieras pintar por encima,
no puedes borrar acuarelas llenas de lágrimas,
unas amargas, otras dulces...

En mi velero me hago tan grande,
que la palabra insignificante se evade a los lejos,
tal cual las olas y mientras me abro de brazos,
me desnuda la brisa marina,
descalzo, con las sonrisa sin forzarla.

Ojos tímidos de apertura,
que ven más lejos que lo que se puede ver,
por que lo que uno ve por dentro no se ve por fuera,
dejando un rumbo loco de entendimiento,
pero lleno de sentimiento.

No tengo tiempo,
que me acorte mi espacio,
que sea vacío,
que me retrate en un mundo mecánico...

La fábrica vacía

Sólo camino para comprender mi perspectiva, no busco tener respuesta a todo, por que hay muchas perspectivas diferentes, en la complejidad d...