sábado, abril 19, 2014

STEPPENWOLF

Un lobo nunca abandona su rastro, aunque se salga de su camino, siempre vuelve.

El pilar que sostiene su fuerza necesita ser reforzado, necesita otra reforma que le haga seguir adelante. Muchas son los días plácidos, aunque el temple lo sostenga, de su sangre ebullen muchas  cicatrices, necesita reconstruir otra vez su equilibrio interior.

Qué significa cambiar de hábitos? Nos acomodamos a una rutina donde nos pegamos como si fuéramos esclavos de esa tranquilidad. Pero siempre falta algo, que tarde o temprano hace romper cualquier equilibrio donde nos asentamos.

Me siento como un luchador que está hambriento de encontrar el camino que me sienta vivo. No quiero sentirme acomodado, aunque es un lugar plácido, yo siempre intento volver al camino de origen.

La vida es la mejor escuela, cuando hay errores nunca hay que olvidarlos, y si buscar la raíz del derrumbe. En esta vida no se aprende de los momentos favorables, no hay que ser negativo para saber que siempre aprendemos de los obstáculos, y hay que saber encontrar la salida para volver al camino real y que nos mantiene vivos. Vivos en el sentido de saber sentir con apego lo que realmente queremos y no por comodidad.

La felicidad no es una palabra tal cual, no es un estado, no es una forma de vivir, no es una meta. Esa palabra no existe para mí, para mi sentir el día a día con ganas, con ilusión, con sentir que es lo que tengo alrededor y valorar el presente con no quedarme quieto como un cadáver del deseo...

Un lobo no busca lo que todos admiran, busca siempre un camino donde sus sentidos no se pierdan por el camino.

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