ni hablar al silencio sin escucharse por dentro...
Somos analfabetos de la vida,
buscando justicia sin oír ni ver,
encerrados en la burbuja
de ser jueces de comportamiento.
Nadie sabe resolver un error
sin haber visto que daño hace
o que razón le ha llevado a ello.
La verdad es la defensa de la mentira,
la mentira es el arma de la verdad...
Es lo que piensa este mundo de hipócritas,
un mundo lleno de escaparates en movimiento,
con gestos y causas sin por "qués" ni "comos".
Escondidos por dentro,
y con la conciencia olvidada.
Un mundo con caras bonitas y corazones fríos.
Odio este mundo, lo odio con todas mis fuerzas.
Pero el mero hecho de odiarlo,
me hace participe de ser un vulgar mas que lo hace mas ridículo.
Yo no quiero ser justo, ni neutro...
Quiero oír y que me enseñen,
no me interesan los no sé,
la duda es parte del engaño.
Soy a veces radical y eso me hace inútil,
soy a veces pacífico y pasota,
y eso me hace ser intolerante.
Quiero tener la misma sensación que cuando jugaba con una paleta y un cubo en la arena.
Quiero olvidar saber lo horrible que puede ser la verdad que me rodea.
Quiero saber quién soy y no que han hecho de mí.
Quiero verme por dentro lleno y no sentirme vacío por engaños.
Yo solo he sido siempre sincero,
y eso ha hecho de mí alguien rechazado.
Aunque me equivocara sabiendo que no tenía razón lo decía.
Para así darme cuenta de mí error.
Aunque el fin no justificaba los medios.
Sabía que me equivocaba y no lo ocultaba.
Otros por mas fueron perdonados y queridos.
Esto demuestra que la verdad solo la tenemos encerrada,
y somos egoístas y fríos.
Ahora, un no sé sería falso.
Tengo claro que no hay un fin sin un trayecto.
Y por ello, por mucho que duela,
sigo odiando este sucio mundo contaminado.
Sacar una sonrisa a alguien que no espera nada de ti
es lo único que me hace feliz,
ya que no espero nada de nadie.
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